20 septiembre 2008

Plegaría a una mujer





















Encántame con suaves besos
Borra del ayer las marcas de mi cuerpo
Protégeme de la tentación de caer en la soledad
Dame algo por lo cual continuar
Que nazca en mí la fe para creer en el amor de una mujer
Cuida de mi alma que no muera la esperanza
Que no me falte tu pecho para huir de mis pensamientos
Que no me falte la voz que hace delirar mis sueños
Un lugar en tu cintura para siempre posar mis manos
Y que siempre sobre la caricia que me ha de arrullar
No me dejes caer en la tentación de no querer tu amor
Devuelve el equilibrio perdido de mi vida
Que no falten tus sonrisas
Ten algo siempre para mí
Que tus manos guíen mi existir

Pido que tu alma nunca se rompa
Siempre tendrás los besos de mi boca
Y no te faltara mi palpitar
Te daré mis días
Y nuestras serán las noches
Siempre tendrás un beso que no te quite el andar
Un abrazo que logre al mundo paralizar
Me tendrás a mí para verter la hiel de tu alma
No dudarás de mí
Nadie te quitará el invierno
Y siempre tendrás la primavera
Bajare las nubes para que juegues en ellas
Seré tus alas cuando quieras volar
Me disfrazare de oscuridad si te quieres ocultar
Descanso no te faltará
El mar a tus pies estará

Transfórmate en mis senderos
Se para mi el cielo
Que el destino no sea cruel conmigo
Hállame si me encuentro perdido
Inunda mi mundo de melodías
Que nunca deje de escribir poesías
Darle más importancia al universo y a la tierra
Concédeme tres deseos y dime como utilizarlos
Dame tus suspiros que serán mi alivio
Dame el habla para gritar mis pensamientos
Dame la voz para decir lo que siento
Regálame fuerza para levantar mi alma
Que al abrir los ojos siempre halla un mañana
La virtud de amarte sea capaz de jugar con la eternidad
Llévame siempre de tu mano
Que no me falte el sabor de tus labios

En la enfermedad no seré la cura pero te haré sanar
Te inventare jardines con rosas y arco iris
No tendrás todo lo que imagines para que siempre imagines
Te daré alivio y abrigo
Frío contra el calor
Sombra si te abruma el sol
Refugiare tus miradas en mi piel
De lo que tu alma quiera te saciare
No te dejare caer en la tentación de olvidar el amor
No te faltará un cuerpo donde tu alma posar
Siempre tendrás unos ojos en los cuales confiar
Mi alma abierta para ti siempre estará
Con cada beso aplacare la tristeza
Mimare con eternidades tus labios
De quimeras serán mis caricias
Para ti la inmortalidad de mi amor





Escrito por Javier Abarca Lagos