
Déjame pensar en ti, aunque yo para ti no exista
Déjame soñar contigo, aunque el estar sin ti no me deje dormir
Déjame creer que estoy junto a ti, aunque nunca te hallas acercado
Déjame rozar tu corazón, aunque no sea para mí
Déjame abrazar tu cuerpo, aunque desaparezcas al intentar tocarte
Déjame hablarte, aunque no se si quieras escucharme
Déjame buscarte, aunque se que no te encontraré
Déjame jugar con tu pelo, aunque sea por un segundo
Déjame ver tus ojos, aunque no me dejes leer tu corazón
Déjame sentir tu mirada, aunque no creo que me mires
Déjame tomar tu mano para que camines junto a mí
Déjame oír tu voz para no dudar que estas aquí
Déjame que te abrace para no creer que me e quedado solo
Déjame liberar tu alma para que se una a la mía
Déjame decir te amo para que me dejes dar mi vida por ti.
Escrito por Javier Abarca Lagos